Bendita rebeldía

Escribir mis vivencias es la forma en la que traduzco lo que me inquieta y le doy salida a lo que me estresa; es la manera en la que pongo orden mis pensamientos y me reubico dentro del contexto de este proceso en el que el único resultado aceptable es: EL BIEN.

Algunas veces me encuentro a mí misma considerando la idea, de cuánto daría por tener una vida sin tantos ‘retos’. Cuando pienso que tengo suficiente «en mi plato», se suman otro montón de cosas que sinceramente ni entiendo. No me estoy quejando, puedo ver que atravieso por momentos en los que interiormente me rebelo, porque es parada en esta bendita rebeldía, desde donde puedo ubicarme correctamente para avanzar:

Me rebelo ante el hecho de verme como quien anda «detrás de la pelota en la cancha», para verme en la posición de quien hace el primer tiro, dando dirección e intención al saque.
Me rebelo frente a la expectativa de que lo que está por venir son más complicaciones y dificultades, aún cuando las circunstancias así me lo aseguren.
Me rebelo ante la presión de las personas bien intencionadas, tratando de hacerme ver que el único camino correcto es que ellos han elegido (sin tener la menor idea de lo que estoy pasando). Agradezco, respeto y considero sus opiniones; pero elijo no tomar ningún sentimiento que añada carga alguna sobre mí.
Me rebelo a la idea de que el aparente silencio de Dios frente a ciertos asuntos, signifique su ausencia ó desconexión de la responsabilidad que tiene para conmigo. Él calla de amor por mí y yo guardo silencio con Él. ❤
Me rebelo a aceptar que estoy desprovista de los recursos y la habilidad necesarios para hacerle frente a cada uno de los asuntos que hoy me demandan respuesta. ¡Estoy armada hasta los dientes!
Me rebelo a resignarme a la perspectiva de un futuro incierto y gris, para aquellos que amo, me rehuso a verme «atada de manos» para intervenir frente a la realidad que ellos viven. Mi Creador ha trazado anticipadamente la solución para que yo camine sobre ella.
Me rebelo a admitir que el resultado del dolor sea un tormento para mí, porque en realidad este es solo el momento para comprobar que el hoy puede ser un festejo permanente. Abro mis ojos a los mil y un motivos que tengo para celebrar el estar viva y estar siendo apoderada para enfrentar la fase que está por iniciarse en mi vida.

En medio de esta semana saturada de «complicaciones» pero mucho más rebosada de soluciones, te comparto esta receta que tuvimos como desayuno esta mañana de domingo. Meses atrás hacía unas «papas a la mexicana» que aquí en casa eran un éxito, y en taco con tortilla de harina, algo que hacía que no pudieras parar. Como le hemos dicho adiós a las papas en esta casa (por la cantidad de almidón y poca fibra que contienen), hoy se me ocurrió hacer exactamente la misma receta pero utilizando coliflor picada en trocitos.

RECETA DE COLIFLOR A LA MEXICANA

Ingredientes:

2 tazas de coliflor picada en trozos pequeños
2 cucharadas de aceite de coco
1/4 de cebolla blanca picada finamente
1 tomate roma picado
Chile jalapeño picado al gusto
Queso mozzarella rallado (opcional)
Sazonador de ajo ( Yo utilizo un sazonador sin sal de la marca Mrs. Smith)

Procedimiento:

Sofreír la coliflor en el aceite de coco, sazonando con el ajo en polvo. Revolver por varios minutos hasta que la coliflor esté suave.
Agregar el tomate, la cebolla y el chile a la sartén y continuar revolviendo constantemente hasta que la cebolla cambie de color.