
Posponer el inicio de aquello que para nosotros representa una incomodidad ó la pérdida de nuestros privilegios, es algo muy común cuando se trata de hacer cambios en nuestra alimentación. «Mañana comienzo la dieta», «Después de Navidad voy a bajar de peso», son solo algunas de las expresiones conocidas por todos. Lo que parece ser un bien intencionado propósito, lamentablemente llega a su fin cuando a penas damos los primeros pasos.
Y es que las cosas que nos parecen ‘imposibles’ – como cambiar de hábitos alimenticios- podemos verlas como parte de nuestro plan, por el simple hecho de sentirnos abrazados a la esperanza de un día lograrlo.
«ALGUN DIA» es precisamente el concepto que estamos comenzando a cambiar en nuestra mente, liberándonos así del círculo vicioso de la auto-justificación en el que nos sentimos confortados por la simple idea de que al menos, lo hemos intentado.
Estamos comprobando que está bien DEJAR PARA MAÑANA estos asuntos, si estoy clarísimo y enfocado en lo que que PUEDO hacer hoy:
1. Mañana comienzo la dieta, pero HOY voy a disponerme a dar pasos de hormiga, graduales y constantes, en el rumbo de aprender e incorporar hábitos alimenticios que contribuyan a mi salud integral. Las dietas son un fraude; lo que funciona es participar de un nuevo estilo de vida que trabaje para mi bienestar. No voy a hacerme tonto; voy a reconocer lo que valgo y desde ahí comprender que se trata de comer para vivir.
2. Mañana empezaré a ir al gimnasio, pero HOY voy a re-evaluar mis prioridades, en el entendimiento de que el estado de salud de mi cuerpo es tan importante, como todo lo demás que considero digno de mi tiempo, dinero y esfuerzo. En lugar de iniciar con metas grandes, comienzo con caminatas cortas (en lugares seguros), donde pueda disfrutar de estar al aire libre y de un rato de sol. Ejercitarme no es sinónimo de martirizarme; puedo encontrar una actividad física recreativa que traiga para mí los beneficios necesarios.
3. Digo: «Comamos y bebamos, que mañana moriremos», pero si entiendo que tengo oportunidad de comer y beber para mañana vivir plenamente, HOY elijo la segunda. Tengo mucho todavía por descubrir, conocer y comprobar en los años que me quedan, como para consentir que mi estilo de vida esté sustentado sobre una perspectiva en muerte.
Así estamos viviendo el HOY, mientras que seguimos incursionando a probar nuevas especies y vegetales en nuestra comida diaria. Lo que esta ocasión les comparto es la receta de un estofado de verduras que es realmente diferente a lo que he cocinado antes; primero porque no contiene carne, segunda porque está condimentado con cúrcuma (una especie que se está volviendo mi favorita por su sabor y sus propiedades) y tercero porque incorpora los camotes que en realidad no había utilizado mucho en casa, pues según esto no les gustaban. ¡Ahora sí se los comieron con gusto!! Advierto que esto es para paladares que se atreven a probar algo diferente. 😀
ESTOFADO DE LENTEJAS Y CAMOTES SOBRE QUINOA
(Tiempo de preparación: 35 -40 minutos)
Ingredientes:
1 taza de quinoa (yo utilicé quinoa tipo arco iris que viene en varios colores)
2 tazas de agua
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cebolla blanca pequeña picada finamente
3 tallos de apio picados
4 zanahorias picadas en trozos pequeños
500 grs. de camote picado en trozos pequeños (Sweet potatoes)
2 cucharaditas de cúrcuma en polvo ( lo más orgánica que puedas encontrarla).
Sal y pimienta al gusto
4 tazas de caldo vegetal ó agua (yo utilicé caldo de pollo)
3/4 taza de lentejas rojas (se encuentran en las tiendas de productos orgánicos)
3 hojas de laurel
1 cucharada de tomillo fresco picado
2 cucharadas de sidra de manzana (apple cider)
1 taza de yogur griego
La ralladura de un limón (aclaro – limón amarillo- en algunos lugares le llaman limas)
2 tazas de espinacas picadas finamente
1/4 taza de cilantro picado
1/4 nueces (piñones ó nueces de castilla)
Procedimiento:
- Cocinar la quinoa siguiendo las instrucciones del empaque, o bien puedes ver este artículo donde explico cómo hacerlo. Oprime aquí.
- Mientras tanto, calentar otra olla ó sartén profundo a fuego medio. Agregar el aceite, la cebolla, el apio y las zanahorias. Sofreír por varios minutos hasta que comiencen a ablandar. Añadir el ajo, camotes, cúrcuma, sal y pimienta. Continuar moviendo por unos minutos más para que las especias y el ajo se cocinen junto con las verduras.
- Incorporar el caldo de vegetales (agua ó caldo de pollo) a las verduras del sartén. Esperar a que esto hierva para entonces agregar las lentejas rojas. el laurel, tomillo y sidra de manzana (apple cider). Dejar esto a fuego lento por 20 minutos hasta que las lentejas ablanden.
- Verificar si necesitamos añadir más sal y/o pimienta al estofado. En un tazón, revolver la ralladura de limón con el yogúr griego.
PARA SERVIR: ponemos en un plato individual 1/3 de quinoa cocida y encima 1/3 de taza de espinacas picadas. Sobre esto agregamos una porción del estofado de vegetales y decoramos con el yogur griego, cilantro y nueces tostadas.
Esta noche cené una taza pequeña de lo que quedó de este estofado de verduras que hice un par de días atrás, solo le puse yogur griego encima…….. (sin quinoa) ¡Muy bueno! 😀
[…] Estofado de lentejas, con camotes y quinoa. […]
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